
“Le quitan 7 años de cárcel por intentar matar a su novia al admitir que sufrió un ataque de celos”. Es decir, que un ataque de celos justifica una pena mínima a pesar de haber intentado asesinar a la novia. ¿Trastorno mental transitoria? No lo sé, porque no conozco la pericial forense. Sin embargo, me temo que estemos ante lo de casi siempre: era celoso y se sobrepasó, como si los celos fueran justificantes; en un arrebato...; es decir, se admiten justificaciones porque estamos, en bastantes casos, ante la presencia del “macho ibérico”; lo que me recuerda aquella sentencia que reconocía que el individuo, delincuente confeso, había sido educado en el franquismo o había que comprender las reacciones propias de quien se consideraba “macho ibérico”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario